La palabra búnker es un término en inglés que hace referencia al depósito de carbono de una embarcación, esta palabra tiene otro significado en alemán que hace referencia al lugar donde uno se podría resguardar de peligros del exterior, mientras que en el español se entiende esta palabra como un refugio subterráneo para protegerse de los bombardeos.

Estas construcciones se popularizaron durante la Segunda Guerra Mundial, cuando las personas hacían referencia al lugar donde se iban a resguardar de los ataques enemigos, tal vez el búnker más famoso de la historia es el “Fuhrerbunker” donde Adolf Hitler pasó los últimos días de su vida.

En el 2020 a raíz de la situación generada por el Coronavirus estas edificaciones volvieron a ganar popularidad, pero en esta ocasión se están diseñando y construyendo con herramientas y materiales de auténtico lujo.

Un reconocido estudio estadounidense, ABIBOO Studio, creó una vivienda o búnker subterráneo de lujo.

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DBX no sólo está pensado para ser como un búnker, está diseñado para que sea una vivienda completamente autosuficiente, con seguridad máxima y diseñado para cualquier emergencia.

Este búnker se encuentra en Carolina del Norte, tiene un avanzado sistema de seguridad y está camuflado, cuenta con mil 200 metros cuadrados y una capacidad para alojar 10 personas o 2 grupos familiares.

Tiene un avanzado jardín de cultivo hidropónico que puede producir alimentos y no requiere de una cantidad excesiva de agua o espacio, además cuenta con un método de purificación de aire que actúa como barrera contra elementos contaminantes o distintivos de virus que se desarrollen en el exterior.

El DBX es un espacio que reúne confort y lujo, y un diseño minimalista con acabados de mármol y mobiliario a la medida, cada una de las habitaciones posee un baño tipo suite con duchas y saunas. Para el entretenimiento hay una sala de cine y juegos, así como maquinas para poder hacer ejercicio.

Este búnker puede replicarse en cualquier país y adaptarse a las diferentes necesidades del cliente.

Otros constructores de búnkers que han visto un aumento en su negocio son Larry Hall y Robert Vicino, que construyen búnkers con puertas blindadas de acero y todas las comodidades posibles para vivir meses o hasta años.

VIVOS, la compañía de Vicino, ofrece mini búnkeres a partir de 40 mil dólares, pero también fabrica búnkeres más lujosos que llegan alcanzar los 4 millones de dólares.

VIVOS tiene un proyecto en Europa que comparan con una nueva arca de Noe, se trata de un búnker de más de 200 metros cuadrados que incluirá piscinas, gimnasios y teatros, los propietarios podrán llegar mediante carro o por helicóptero.

La seguridad es una de las cosas que más caras cuestan y más si no sabes en dónde podrás mantenerte a salvo.

Fuentes: Traveler, BBC, Tresmasa

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