La isla italiana de Capri es destino predilecto para millonarios de todo el mundo; se caracteriza por sus hermosos paisajes y la tranquilidad con la que el jet set se pasea por sus calles.

La pequeña isla de Capri, en el golfo de Nápoles, es famosa por haber refugiado, desde la mitad del siglo pasado, a políticos, actores, intelectuales y gente millonaria en general.

Anacapri, la segunda localidad más importante en Capri, esconde el lujo más desconocido de la Isla: el interior de la iglesia de San Michele.

Detrás de una fachada que no llama mucho la atención (frontal neoclásico, blanco), el interior del templo tiene un pavimento colosal.

Creado en 1761 por uno de los principales ceramistas residentes de Nápoles, Leonardo Chiaese,  reproduce el Jardín del Edén y el preciso momento en que Adán y Eva son expulsados de él, por haber roto las normas.

El piso es octogonal, y esa parte de la iglesia ha sido desalojada de mobiliario para el disfrute de la obra de arte. Y de hecho, sólo se puede caminar por sus bordes sobre unas pasarelas de madera, para no pisar la obra de arte.

Puedes subir por una escalera de caracol al coro, para tener una visión completa de la magnífica obra de Chiaese.

Esta obra de arte es un lujo que esconde la isla de Capri, que sin duda justifica un viaje a la isla.

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