Es conocido por los amantes de los relojes, que los Tourbillon son magníficas piezas de ingeniería mecánica, complicados sistemas de engranajes y piezas únicas.
Su principal característica radica en la pequeña caja cilíndrica con la que cuentan, y que da una vuelta por minuto.
Desde su creación, en 1801, este tipo de relojes han sido la base para la creación de maravillosas y hermosas máquinas del tiempo.
En esta ocasión, CORUM diseñó un hermoso reloj, basado en el mecanismo del “torbellino”.
Hablamos del Corum Bubble 47 Flying Tourbillon, una pieza única, en una caja de oro rosa.
La irreverente estética del reloj Bubble, se caracteriza por su domo sobredimensionado de cristal de zafiro; toma su nombre al asemejarse a una burbuja. En esta edición, se ha incluido un cráneo, así como un tourbillon.
El tourbillon es la complicación reina de la relojería; en el Corum Bubble se deja ver en la mandíbula de la calavera, donde es visible el microrrotor, que sobrevuela un fondo negro, y da el aspecto de flotar.
Al fondo de la pieza, se puede ver la inscripción “Unique Piece”, grabada en la parte trasera.
El Bubble 47 Flying Tourbillon, tiene una resistencia al agua de 30 metros.
¡Un reloj espectacular!, el cráneo que todos desearíamos tener en la muñeca.