Febrero, mes del amor y la amistad. Oportunidad única para confesar lo que sentimos por esa persona especial, un mes en el que se desborda cariño por todos lados.
Sabemos bien que se pueden regalar infinidad de cosas, desde chocolates, joyas y ropa, hasta una comida o cena.
En nuestra opinión, nada mejor que esto último, una cena romántica con tu pareja, en la que disfruten de una gran experiencia. Algo que vaya más allá de un buen platillo o un buen servicio.
Por eso, tenemos algunas recomendaciones, algunos lugares a los que puedes invitar a esa persona especial, y disfrutar juntos de una noche de ensueño.
Les recomiendo algunos restaurantes en la Ciudad de México, para que el 14 de febrero se convierta en un día especial.
Au Pied de Cochon. Este restaurante forma parte de la cadena hotelera «Presidente Intercontinental». Por 2,950 pesos tienes derecho a un menú de tres tiempos, no solo en Au Pied de Cochon y otros restaurantes del grupo, sino también a una habitación, fresas con chocolate a la habitación, champaña, y estacionamiento para tu auto.
Central Brasserie. Las cenas del 14 de febrero se han vuelto ya una tradición en este lugar. Tiene dos sucursales: Una en Santa Fe, ubicada en Javier Barrios Sierra 540, colonia Lomas de Santa Fe; la otra está en Polanco, en Presidente Masaryk 123.
Restaurante Roseta. Es un lugar para enamorarse todos los días, su ambiente relajado y agradable, brinda la ocasión perfecta de conversar, mientras disfrutas de una exquisita comida. Su especialidad es la cocina italiana, aunque muchos comensales disfrutan de sus variedades de pan dulce y salado. Si quieres sorprender agradablemente a tu pareja, este lugar es una gran opción.
Anatol. Está en boca de todos. Al hablar con chefs y preguntarles sobre sus restaurantes nuevos favoritos, su nombre se escucha una y otra vez. El menú es breve y eso se agradece. De entrada, lanza los clásicos platillos enganchafoodies: hamachi, aleta amarilla y coctel de camarón.
Nicos. El gusto por la tradición los ha llevado por un largo camino: es la magia de lo elemental.
Pujol. Ubicado en Polanco. La cocina como expresión filosófica. La preparación de los alimentos: como una metodología de la sutileza. El restaurante: como un espacio de introspección. El chef: como un creador.
Máximo Bistrot. Posicionado en esquina discreta de la Roma, el restaurante sigue la estricta filosofía de apoyar los productos nacionales. Lo demuestra en todos los aspectos del restaurante, desde sus servilletas tejidas a mano por artesanos oaxaqueños, hasta la selección diaria de platillos, dependiendo de los ingredientes disponibles, todos locales. Una opción perfecta.
Así que ya lo saben, si quieren quedar como el mejor del mundo, disfruten al lado de su pareja una experiencia gastronómica inolvidable, que se grabe en sus mejores recuerdos.