La industria cinematográfica es una de las más rentables a nivel mundial. Si eres aficionado y quieres conocer las grandes películas, no puedes dejar de ver las siguientes:
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Ciudadano Kane (1941)
Una de las películas más aclamadas en la historia del cine, es la obra de un joven Orson Welles que relata la historia de un magnate estadounidense, Charles Foster Kane, que al momento de su muerte pronuncia una última palabra: «rosebud», un misterio que despierta la curiosidad de la prensa, que intenta dar respuesta a la incógnita.
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Casablanca (1942)
Humphrey Bogart e Ingrid Bergman comparten la pantalla grande como Rick e Ilsa, separados por el destino y la invasión alemana. Este romance se complementa con canciones inolvidables, escenas memorables y la frase ideal final.
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Sed de mal (1958)
Charlton Heston, agente de la policía de narcóticos, llega a la frontera mexicana con su esposa, en el momento en que explota una bomba, e inmediatamente toma las riendas de la investigación, en colaboración con Orson Welles.
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Vértigo (1958)
Un detective en retiro cae en un abismo psicológico, cuando comienza a investigar la doble vida de una misteriosa mujer, esposa de un amigo adinerado.
Alfred Hitchcock echa mano de todas las herramientas de la cinematografía, para construir una pesadilla que continua, incluso cuando estamos despiertos, y que se siente como una espiral de dolor y remordimiento.
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El Padrino (1972)
Mezclando la técnica de la vieja escuela con su ímpetu juvenil, Coppola construyó una impresionante película alrededor de estos actores.
Hay cintas que tú quieres ver o necesitas ver, una o dos veces en tu vida, pero El Padrino sobresale como una pieza que la gente ve una y otra vez, demostrando en cada oportunidad, una mayor riqueza lejos de la sombra del tiempo.